Los 17 años de Los Ángeles Azules

Édgar Velasco
3 min readJun 15, 2021

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Como viene siendo costumbre cada tanto, ayer las redes sociales se dividieron de nueva cuenta y lo hicieron a ritmo de cumbia: Los Ángeles Azules, uno de los grupos más queridos de México, estuvo en medio de los dos bandos debido a que un tuitero cuestionó el contenido de la letra de la canción 17 años, de los iztapalapenses.

La letra dice:

Amigo, sabes, acabo de conocer
Una mujer que aún es una niña.
Sabes, tiene los 17 aún.
Es jovencita y ya es mi novia.
Amo su inocencia (17 años).
Amo sus errores (17 años).
Soy su primer novio (17 años),
su primer amor.

Es callada, tímida, inocente tiene la mirada
Le tomo la mano y siente algo extraño.
La abrazo, me abraza y empieza a temblar,
Temblar de miedo diciéndome que nunca
Había sentido sensación así en su vida,
así en su vida
Que si eso es el amor.

[Quité las repeticiones para ahorrar espacio. Aclaro.]

Uno de los bandos argumenta que la letra hace apología de la pedofilia, pues se trata de un hombre mayor contándole a su amigo que se acaba de ligar a una chica de 17 años. El otro bando argumenta que en ningún lado queda claro que el protagonista de la canción sea un hombre mayor y que toda interpretación corre por cuenta de la pervertida mente de los que ven algo malo ahí. Definitivamente, la canción está muy lejos de hacer apología de la pedofilia. Es por demás evidente que en realidad de lo que habla la canción es de estupro, que, ups, también es un delito.

Llama la atención cómo, en aras de criticar a la llamada “generación de cristal”, hay toda una generación capaz de defender lo indefendible sin un asomo de reflexión. ¿De verdad necesitan que la letra sea explícita y diga “tengo 40” — o 50 o 35 o los que sean — para creer que se trata de un mayor presumiendo que tiene de novia a una chavita? ¿De verdad se imaginan a un muchacho de, digamos, 18–20 años refiriéndose a una joven contemporánea como “una mujer que aún es una niña”, que “es jovencita y ya es mi novia”? Vamos, que tampoco es que se exija demasiado esfuerzo para ver lo evidente. Hubo incluso voces que reclamaban que ahora también iban a “cancelar” la canción 40 y 20, interpretada por José José. Si bien es cuestionable que alguien busque una relación con otra persona 20 años menor, lo que pasan por alto quienes quisieron rasgarse las vestiduras es que, en ese caso particular, es una relación entre dos mayores de edad. Vamos, que no hay estupro, como en la otra.

Cada que alguien clama que “ya no se puede decir nada” me pregunto por qué les puede tanto que haya personas o grupos que cuestionen y pidan una reflexión mínima ante cosas y situaciones que nos parecían bien vistas y que quizá, sólo quizá, no sea tan buenas. ¿De verdad es tan difícil detenerse a pensar, reflexionar, analizar los argumentos del otro y luego entonces emitir una opinión? ¿De verdad se nos va a acabar la alegría de vivir sólo porque alguien nos pide que reflexionemos? Vamos, que difícilmente la canción va a dejar de sonar y quienes la escuchen — o escuchemos — seguramente terminarán — terminaremos, pues — bailándola: a final de cuentas también somos nuestras contradicciones, ¿no? Lo único que se pide es que las reflexionemos un poco y seamos más conscientes de las cosas, incluidas las que veíamos bien y que quizá, sólo quizá, no estén tan bien aunque salgan desde Iztapalapa para el mundo.

La foto que ilustra este post fue publicada por Los Ángeles Azules con el texto “De esto trata 17 años. Fin del comunicado”. Como se puede ver, lejos de abonar a la reflexión, salieron por la puerta fácil y reforzaron el argumento de que se trata de una canción que cuenta una relación entre muchachitos. Allá ellos.

Para finalizar, me resulta sintomático que quienes se quejan y se burlan todo el tiempo de la llamada «generación de cristal» tampoco se ven muy resistentes a la crítica y a la reflexión. ¿Pues qué son? ¿Mazapanes?

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Édgar Velasco
Édgar Velasco

Written by Édgar Velasco

Patafísico reprobado. Escribo cuentos. Publiqué «Fe de erratas», «Ciudad y otros relatos» y la plaquette «Eutanasia» (Paraíso Perdido, 2018, 2014 y 2013).

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